Abrazando a la Ciudad de México por el sur, descansa El Tepozteco,
una de las cordilleras más hermosas del mundo,
nacida en el cuaternario para formar el Eje Neovolcánico de México.
Esta cordillera es refugio tradicional para gente de la Ciudad de México,
por su belleza y su cercanía: sólo 90 minutos de camino en coche.
El clima es suave y placentero todo el año,
llueve de junio a septiembre, florece en octubre y noviembre,
y el estiaje aprieta de amarillo de febrero a mayo.
Los paisajes y las vistas, los sonidos, los olores y la luz
son siempre dulces e inspiradores.
Este valle secreto está repleto de veredas y caminos de monte
para andar libremente por ellos, a pie o en bicicleta de montaña
En esta atmósfera de sabor sagrado nació Splendor Omnia en el año 2011.
Vivimos en un valle silencioso, casi secreto, en lo alto de las montañas
verdes y rocosas, a 2050 m.s.n.m.
Nuestras edificaciones están hechas con madera, tierra y paja
y se unen entre sí por suaves caminos de gravilla ámbar y rosada,
siempre rodeados de vegetación local y los árboles más tradicionales de México:
encinos, ocotes y cazahuates.
Nuestro comedor es un espacio muy amplio con vistas inolvidables
hacia la cara norte del Tepozteco, normalmente oculta, y abrigo de cactus endémicos.
En tiempo de frio nos acompaña el fuego de una chimenea de piedra volcánica.
Nos preocupamos de servir una comida de la mejor calidad,
no industrializada y de mucho gusto y variedad.
Blanca cocina con el sazón de este lugar, y con una visión culinaria de todo el mundo.
Aquí se desayune, se come y se cena, sin tener que preocuparse de nada.
La miel es de las flores que aquí nacen
y los huevos son de nuestras gallinas, alimentadas de manera orgánica
Para dormir contamos con unos bungalows muy amplios en medio del bosque,
donde nuestros huéspedes se instalan cómodamente y en toda privacidad.
Su techo funciona como superficie para las celdas solares
que producen la energía limpia con la que funcionamos.
Todos nuestros techos son, además, receptores de lluvia.
Nuestra agua es toda de captación pluvial.
Para dormir contamos con unos bungalows muy amplios en medio del bosque,
donde nuestros huéspedes se instalan cómodamente y en toda privacidad.
Su techo funciona como superficie para las celdas solares
que producen la energía limpia con la que funcionamos.
Todos nuestros techos son, además, receptores de lluvia.
Nuestra agua es toda de captación pluvial.
En Splendor Omnia hemos pensado con cuidado y trabajado con esmero
para lograr unos estudios de imagen y sonido
de calidad tecnológica y maestría técnica de nivel mundial.
Todo ello en medio de una atmósfera plena de belleza, tranquilidad
y predisposición para la creatividad
Aquí estamos, listos para recibirte.
